martes, 5 de mayo de 2015

la bella y el turrón

había una vez una bella dama
envuelta en capas de satén
que sonreía pícara y deseosa
cuando señalaba con su índice
a una de las del harén
para que le baile en su regazo
y le de turrón en la boca

me daba mucho asco mientras
esperaba sentada en un almohadón de terciopelo
me daba mucho asco cuando
me intentaba seducir
y me vestía con sus ropas más hermosas
me daba mucho asco que
arrogante
me mirara decidida
me daba mucho asco como
todas las demás
bailaban una por una a su son

estaba escrito
desde el día en que me eligieron
que yo también lo haría
pero no entendía
cómo todas podían
estar tan
locas
por esa que las engatusaba con
perfumes lindos y palabras vacías

hasta que me señaló
una noche de octubre
me miró
me sonrió
y me señaló
me levanté
caí en el hechizo
caminé hacia ella
besó mi mano y yo me arrodillé
era tan hermosa
su piel, tan suave, tan tersa
no podía creerlo
la que me daba asco
la que me repugnaba
al ver como trataba a las otras
pensé que yo no me iba a dejar engañar
y ahí me encontraba
bailando a sus pies
pero no podía resistir su belleza
no podía resistirme a ella
a sus dedos corriendo el pelo de mi cara
me di asco
quise revelarme
puse el turrón entre mis labios
y me acerqué para que muerda