jueves, 20 de octubre de 2016

this song is called ''I'm so sad, so very, very sad''

-disclaimer: este es un post descargo largo, más que nada para que lo lea Nando, aunque no sea especialmente para él, pero es el único al que se me ocurre que le puede llegar a interesar esto. Es medio una boludez, pero es cierto que me vengo sintiendo mal, y quería escribir algo largo y divagar un poquito. Así que nada, eso, hola.-


Leí un post que decía algo así como hacer un ejercicio para conocerte mejor: escribir todo lo que no sos. Y me costó, quite a lot. Porque me siento que yo no soy yo. Siento que mi piel ya no me representa y me molesta. Tuve un par de días de tener el autoestima en el centro de la Tierra, cosa que hacía mucho no me pasaba. Y recién con ese post me di cuenta que el problema no era el autoestima, el problema era yo. El problema que esto ya satisface mis necesidades. Estaba en el muro de una minita que siempre me gusta stalkear, que me acompleja por el hecho de que (al menos en las redes sociales parece que) ella se siente cómoda con su ser. Y ahí entiendo a mi tan odiada Catalina, cuando se rapó la mitad de la cabeza y le quedaba horrible. Porque ahora siento la necesidad de raparme toda la cabeza. Tengo un nudazo en el pecho que siento que lo voy a poder desatar si me deshago de esto que soy ahora. Claramente siento que el primer paso es cambiar mi cerebrito, pero como no sé cómo hacer eso, siento que va a ayudar si primero cambio por afuera.
Desde que mi pelo ya no es mitad rosa, sino que es todo con el mismo degradé, me siento, no sé, menos yo. Y eso que cuando me desteñí la otra mitad lo hice porque sentía que eso ya no era yo. Últimamente cuando me volví a teñir el pelo, le pregunté al chabon con el que salgo si lo debería hacer o no. Él me dio su opinión, siempre terminé tiñiendomelo como quería, pero por un lado pienso, ¿qué importa lo que piense él? Y por el otro, tengo terror a que no le guste.
Ahora quiero cortarme el flequillo, hacerme un carré, teñirme de negro, llenarme de tatuajes, hacerme un piercing (aunque sea muy alérgica al metal y lo sé (y por eso en realidad no tengo ninguno)), vestir diferente. Y eso es algo que siempre pienso, por ejemplo. Que quiero vestir diferente. Me compré altos borcegos y me dije: los voy a usar siempre. Para ir por la calle, a comprar un pincel al centro. O simplemente: voy a tener un look super grunge darks porque me gusta. Y siempre, SIEMPRE, termino vistiéndome normal, porque o me da vergüenza ponerme los borcegos, porque tengo miedo de encontrarme a alguien que conozco, o no tengo una remera linda negra limpia, porque vaya uno a saber por qué. Y volvemos a este inicio. A esta cosa. Me gustaría tirar al carajo toda la ropa que no vaya con ese look, para obligarme a llevarlo, pero es mucha plata y me quedaría con muy pocas cosas. Y me re odio por eso. Por no ser constante. Porque en ese momento me sentía bien y no me molestaba usar una remera anaranjada. Es como raro, esto. Quiero ser darks y no me sale. Quizás yo no soy eso? Pero posta tengo una necesidad increíble de arrancarme la piel. Lo gracioso es que al chabon este con el que salgo le gusta toda esta onda punk grunge y las minitas re darks y eso. Y te juro que una parte de mi siente que lo hago por él, siento un pequeño vecino machista en mi cabeza que me dice que soy re puta, que lo hago para gustar, que soy pija-dependiente. Pero lo cierto es que cuando intento pensar en lo que siento, sólo pienso en ese tipo de estilo. Porque lo que siento que necesita mi alma es destruir cosas. Es arrancarme la ropa, que quede toda rasgada y se me vea el corpiño, ensuciarme toda, cortarme mal el pelo, tener el maquillaje corrido y vivir con un pucho en la mano y lentes de sol. Vivir en una habitación con todas las paredes grafiteadas. Es como llorar y pegarle un puñetazo a la pared, que la rompas y que atrás haya un campo soleado con flores y animalitos del bosque esperándote para que seas su ninfa; pero con vos.